Importantes novedades en coches autónomos
En la era de los coches eléctricos aparece un competidor que se está robando las miradas: los coches autónomos. Un automóvil autónomo tendrá una tecnología y sistemas tan avanzados que podrá funcionar sin control humano. El concepto ha evolucionado a lo largo de los años, pero todavía se refiere a autos que no necesitarán un conductor.
Los coches autónomos imitan las capacidades de un humano al poder percibir el entorno que le rodea. Para identificarlo utiliza tecnologías como sensores, radares, cámaras de visión artificial y GPS. Así, el usuario elige el destino, identifica la ruta, las señales de tráfico y es capaz de reconocer los obstáculos.
La industria automotriz designa seis niveles de autonomía, según la norma SAE J3016. Hasta ahora, el mercado se ha desarrollado hasta el nivel 3 de autonomía. Repasamos cada nivel de autonomía.
Nivel 0: Sin automatización de conducción
Nivel 1: Asistencia al conductor, ya sea en el control del movimiento longitudinal o del movimiento lateral. No ambos. Todas las demás actividades recaen sobre el conductor.
Nivel 2: Automatización parcial de la conducción. La asistencia está disponible para controlar el movimiento longitudinal y lateral. No hay detección y respuesta a los objetos.
Nivel 3: Automatización de conducción condicionada. Además de la asistencia de movimiento longitudinal y lateral, el sistema puede detectar y responder a objetos. Se habla de un usuario dispuesto a intervenir.
Nivel 4: Alta automatización de la conducción. Dispone de asistencia para el control de movimiento longitudinal y lateral, y detección y respuesta a objetos. Ya no es necesario un usuario preparado para intervenir. Sin embargo, el funcionamiento del sistema todavía está limitado a ciertas condiciones.
Nivel 5: Automatización completa de la conducción. Además de todas las características anteriores, ya no existen condiciones limitantes específicas para el funcionamiento del sistema. El conductor no es necesario.
Si pensabas que la conducción autónoma era ciencia ficción, abróchate el cinturón, porque el futuro es acelerado, y duro, hacia los coches autónomos. Esta tecnología futurista inevitablemente traerá cambios en la movilidad de las ciudades.